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La situación del comercio bilateral

3. Las relaciones económicas y comerciales en el segundo mandato de Lula (2007-2010)

3.2 La situación del comercio bilateral

Según las estadísticas aduaneras de China, el volumen comercial bilateral entre China y Brasil en 2007 llegó a 23,25 mil millones de dólares, y China tuvo un superávit comercial de 1.897 millones de dólares. En 2008, el volumen comercial bilateral llegó a 36,44 mil millones de dólares y en 2009, el volumen comercial bilateral se redujo ligeramente y llegó a 36,10 mil millones de dólares.

Al final de 2010, el volumen comercial bilateral llegó a 56,38 mil millones de dólares. Véase el siguiente gráfico sobre la tendencia de crecimiento del comercio entre 2007 y 2010.

Gráfico 2: El comercio de China a Brasil (2007-2010)

Unidad: cien millones de dólares

Ͳ100 0 100 200 300 400 500 600

2007 2008 2009 2010

cienmillonesdedólares

Total Exportación Importación Saldo

Año Total Exportación Importación Saldo

2007 233,25 126,11 107,14 18,97

2008 364,42 200,39 164,03 36,36

2009 361,02 159,11 201,91 -42,80

2010 563,82 255,93 307,89 -51,96

Fuente: Elaborado por el propio autor, con base en China Customs Statistics, http://www.drcnet.com.cn.

En cuanto a la competencia, los productos brasileños con ventaja relativa son los alimentos, tabaco, bebidas, materias primas (combustible no mineral), aceite de animal y vegetal, grasa y cera. Mientras que los de China son equipos y máquinas de comunicación y transporte, utensilios de decoración interna, muebles y cubrecamas, maletas, bolsas y recipientes, zapatos y gorras, todo tipo de instrumentos de precisión, equipos automáticos y toda clase de productos manufacturados. Así, como ha señalado Yang (2008: 3), China y Brasil poseen una fuerte complementariedad comercial que beneficia mucho un mayor desarrollo del comercio bilateral.

Las mercancías de algunas categorías de Brasil tienen una fuerte competitividad en el mercado chino. Las mercancías exportadas por China a Brasil son relativamente diversificadas. Son principalmente computadoras, televisores, piezas y repuestos de equipos de informática, coque y semicoque, piezas y repuestos de equipos de procesamiento automático, técnica electrónica, técnica de la ciencia de vida, chapas de acero, confecciones de punto, piezas de moto y bicicleta, etc. (Ko, 2011: 5).

En el siguiente cuadro, hemos puesto el índice de ventajas comparativas reveladas16 de Brasil con China (2007-2008).

Cuadro 8: Índice de ventajas comparativas reveladas de Brasil con China (2007-2008)

Año Sector Brasil China

2007

Primario 2,01 0,31

Recursos naturales 1,17 0,47

Baja tecnología 1,12 2,02

Media tecnología 0,76 1,10

16 El índice de ventajas comparativas reveladas (VCR) pretende indicar el potencial exportador de un determinado país en relación al resto del mundo. Países con indicadores similares tienden a mostrar un bajo volumen de comercio bilateral (excepto en la presencia de un intenso comercio intra-sectorial), mientras que las divergencias sugieren mayor complementariedad y, por lo tanto, mayor potencial de expansión del comercio. Un indicador superior (inferior) a la unidad indica una ventaja (desventaja) comparativa producida en este producto/sector con relación al socio comercial.

CHINA (2003-2010) 251

Alta tecnología 0,43 1,30

Otros 0,65 0,08

2008

Primario 2,07 0,30

Recursos naturales 1,03 0,46

Baja tecnología 1,19 2,05

Media tecnología 0,79 1,15

Alta tecnología 0,40 1,32

Otros 0,54 0,07

Fuente: Elaborado por el propio autor, con base en los datos del FMI-Directions Trade Statistics con tres dígitos, http://www.usc.es/congresos/xiirem/pdf/8.pdf.

Como apunta Moreira Cunha (2010: 20), los resultados demuestran que Brasil tiende a perder ventajas comparativas en sectores de mayor intensidad tecnológica. Cuando se compara a China, las exportaciones brasileñas de baja, media y alta tecnología son menos competitivas.

Desde la segunda mitad del año 2008, la crisis financiera internacional ha afectado a la economía en regiones como China y América Latina, pero el volumen comercial entre Brasil y China ha aumentado en este momento a causa de que las importaciones del país oriental se mantuvieron firmemente (Yang, 2009: 32).

Por otra parte, la crisis financiera internacional ha impulsado la cooperación económica y comercial entre China y Brasil, y ha acentuado sus intereses estratégicos comunes en la promoción de la cooperación multilateral. Los dos países han compartido posturas en varios temas internacionales, que abarcan desde la Ronda de Doha17 -la actual ronda de negociaciones de la OMC- a la reforma del sistema financiero internacional.18

17 La Ronda de Doha, de la Organización Mundial del Comercio, es una gran negociación emprendida para liberalizar el comercio mundial. Su objetivo apunta a completar un tema que había quedado pendiente de un gran ciclo anterior (llamado Ronda de Uruguay): el comercio agrícola. Para más información, véase:

http://www.wto.org/spanish/tratop_s/dda_s/dda_s.htm. 18 Esta parte está citada en la siguiente páginaweb:

http://spanish.peopledaily.com.cn/31619/7393164.html.

Asimismo, Urdínez (2011: 12) comenta que, si bien desde la crisis financiera internacional de 2008 las mercancías han sido importantes, Brasil está llevando adelante políticas de colocación de productos de los siguientes sectores:

alimentos y bebidas, máquinas y equipamientos, construcción civil, moda de alto lujo, y otros de aún mayor potencial tales como aviones y partes de aviones, productos metalúrgicos y componentes de calzados.

En respuesta a la crisis, en marzo de 2009 China publicó un artículo titulado

“Reflexiones sobre la reforma del sistema monetario internacional” en el que indica que el objetivo ideal de esta reforma es crear una moneda de reserva internacional a través de la separación del estado soberano y mantener la moneda estable a largo plazo. Lula tuvo una respuesta positiva y dejó claro que la propuesta de China sobre crear una nueva moneda de reserva internacional -en lugar de dólar- era eficaz y apropiada. Además, señala que el sistema de establecer el comercio bilateral con la moneda local era muy parecido a la propuesta china.

Por otra parte, Delage Carretero (2011: 77) señala que, aunque hacer realidad esta propuesta requiere un acuerdo global nada fácil de conseguir, se trata de un claro intento chino de reducir la influencia de Washington en el sistema monetario internacional. A esta iniciativa hay que sumar el hecho de que el propio Gobierno de China ha comenzado a conceder créditos internacionales en yuanes, y a utilizar su moneda a través de acuerdos bilaterales, el más importante de los cuales es con Brasil. En mayo de 2009 se anunció un acuerdo entre los Bancos Centrales de ambos países, por el que las importaciones chinas se pagarán en yuanes, mientras que Brasil pagará sus importaciones de China en su propia moneda, el real, evitando así el uso del dólar.

Por las razones anteriores mencionadas, se multiplicó el crecimiento económico y comercial entre ambos países. Era la primera vez que China superaba a EE.UU. y se convirtió en el primer destino de las exportaciones brasileñas. En abril, el volumen comercial bilateral alcanzó 3.230 millones de dólares y superó los 2.810 millones de dólares de Brasil y EE.UU. De esta forma, China reemplazó a EE.UU., que desde hacía 80 años era el mayor socio comercial de Brasil. Además, la estructura del comercio bilateral se ha diversificado, así que la proporción de los productos de alta tecnología y de alto valor añadido de Brasil aumentaron en sus exportaciones a China (Zhou, 2009: 2).

CHINA (2003-2010) 253

Asimismo, según el informe de Brasil sobre el ambiente de comercio y la inversión (2009), las exportaciones principales de China eran los suministros eléctricos, los aparatos eléctricos, los equipos de audio y sus repuestos, los productos químicos orgánicos, los equipos de foto-óptica y médicos y sus repuestos, los productos de acero y los textiles. Por otro lado, Ko ( 2011: 5) indica que las exportaciones principales de Brasil eran los productos minerales, los productos vegetales, los metales básicos y sus derivados, la celulosa, los papeles, el aceite de los animales y de los vegetales, los plásticos y el caucho.

En el ámbito de las relaciones económicas y comerciales, ya que la estructura comercial de los dos países es muy complementaria, el crecimiento económico puede ayudar a los intercambios económicos y comerciales sino-brasileños a llegar a un nivel alto. La superación de la crisis financiera es la tarea fundamental para la mayoría de los países y también era el enfoque de la cooperación entre Brasil y China. Por lo tanto, la solución de la crisis ha sido esencial para fortalecer la cooperación económica y comercial entre ambos.

Asimismo, Zhou (2009: 4) manifiesta que en los primeros cuatro meses de 2009, las exportaciones de Brasil a los EE.UU. cayeron un 35,3%, las exportaciones a la UE disminuyeron un 28%, mientras que las exportaciones a China crecieron un 64,7%. El superávit comercial de Brasil con los EE.UU. se ha convertido en déficit y el déficit con China se ha convertido en superávit. Y además, China ha logrado ser el mayor socio comercial de Brasil y el país más grande de su destino de exportaciones, mientras que Brasil se ha convertido en el noveno mayor origen de las importaciones de China.

Por otro lado, desde enero hasta junio de 2009, el volumen de exportación e importación entre ambos ascendió a 17.220 millones de dólares, con un incremento del 5,3%. El volumen de las exportaciones de Brasil a China era de 10.450 millones, con un crecimiento del 41,1%, lo que representa un 15,0% del total de las exportaciones de Brasil. Y, el volumen de las exportaciones de China a Brasil era de 6.770 millones de dólares, con una reducción del 24,4%, lo que representa un 12,1% del total de las importaciones de Brasil. Al mismo tiempo, el superávit comercial para Brasil era de 3.680 millones de dólares y el de año anterior fue de 1.540 millones de dólares. Así como señala Yang (2009: 33), a partir de junio China desplazó a EE.UU. como socio comercial más grande de Brasil y fue también el principal receptor de exportaciones brasileñas y la segunda mayor fuente de importaciones para Brasil.

En 2010 el comercio bilateral ascendió a 56.382 millones de dólares, los volúmenes comerciales con Brasil abarcan el 34,18 por ciento del valor comercial de China con todos los países sudamericanos. Las exportaciones de China a Brasil fueron de 25.593 millones de dólares y las exportaciones de Brasil a China llegaron a los 30.789 millones de dólares. China tuvo un déficit de 5.196 millones de dólares. Así, como indica Zuo (2011: 36), China sigue siendo el mayor socio comercial, el mayor destino de las exportaciones y la segunda fuente de importaciones más grande de Brasil, mientras que Brasil superó a India y se convirtió en el noveno mayor socio comercial de China.

En 2010, el 84 por ciento de las exportaciones de Brasil a China fueron materias primas, entre las cuales el hierro, la soja y el petróleo representaban tres cuartos de las exportaciones. Por otro lado, el 98 por ciento de las exportaciones de China fueron productos manufacturados, encabezando la lista los televisores, las pantallas LCD y los teléfonos.

En cuanto a la estructura, según Wei (2009: 3) , los productos principales de China a Brasil fueron las piezas de máquinas, los circuitos integrados y los componentes microelectrónicos, los equipos de procesamiento automáticos de datos y sus componentes, los transformadores, los convertidores estáticos y las bobinas de cable, el teléfono, los equipos de telégrafo, las hiladas de fibras textiles y sus artículos. Por otro lado, China mantuvo una ventaja en las exportaciones a Brasil sobre los productos de mano de obra intensiva, tales como el textil, los muebles y los juguetes, los bolsos de cuero y los productos de la industria ligera, que representan un 42,6%, 51,0% y 67,8% respectivamente del mercado de la importación de Brasil.

Cuadro 9: La estructura de las exportaciones principales de China a Brasil (2010)

Unidad: cien millones de dólares Categorías de productos 2009 2010 Aparatos electrodomésticos, equipos de audio y sus piezas 52,80 79,96 Reactores nucleares, maquinaria y sus piezas 32,15 56,28

Productos químicos orgánicos 11,24 12,84

CHINA (2003-2010) 255

Hierro y acero 3,41 12,05

Equipos ópticos, fotográficos, médicos y sus piezas 7,26 9,17

Vehículos y sus repuestos 3,96 6,76

Fuente: Elaborado por el propio autor, con base en el Ministerio de Comercio de la República Popular China, www.mofcom.gov.cn.

Asimismo, Wei(2009: 3), ha indicado que las importaciones principales de China eran la soja, el mineral de hierro y sus derivados, el petróleo crudo, el cuero, la madera y el aceite de soja. En 2010, el mineral era el producto principal de Brasil a China y el crecimiento económico de China impulsó el aumento del volumen de las exportaciones de Brasil, tales como animales vivos y los productos para animales, el textil, las materias primas, las grasas de animales y de vegetales, los alimentos, las bebidas y el tabaco. Además, fue mayor aún la reducción de los productos de plástico, de caucho y metales.

Cuadro 10: La estructura de las exportaciones principales de Brasil a China (2010)

Unidad: cien millones de dólares

Categorías de productos 2009 2010

Minerales metalíferos, escorias y cenizas 72,13 136,26 Semillas oleaginosas, plantas industriales o medicinales,

forraje 63,43 71,34

Combustibles minerales, aceites minerales y sus

productos, asfalto 13,42 40,54

Pulpa de madera, residuos de papel y cartón 10,97 11,26 Aceite animal o vegetal; grasas comestibles refinadas 4,22 8,14

Hierro y acero 10,45 5,67

Fuente: Elaborado por el propio autor, con base en el Ministerio de Comercio de la República Popular China, www.mofcom.gov.cn.

En la última década, de acuerdo con Mansilla Blanco (2012: 11), los intercambios comerciales sino-brasileños crecieron un 2.300%, con especial énfasis chino en la importación de materias primas brasileñas (agrícolas y minerales), mientras se presenta un impresionante nivel de exportación de productos manufacturados chinos hacia el mercado brasileño que, según diversos analistas, debilita a sectores fuertes de la economía brasileña, como el textil, el calzado y los electrodomésticos.

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